A pesar del contexto actual, , tomando en cuenta el estallido social y la pandemia, se observa  estabilidad, mayor al de otras industrias, en el Mercado Inmobiliario de nuestro país debido a que una de las principales formas de inversión es la compra y venta de bienes inmuebles. Estas operaciones van generalmente relacionadas con créditos hipotecarios en entidades financieras, las que utilizan las tasaciones para determinar el monto de dichos créditos. Es en este punto donde la tasación inmobiliaria cobra vital importancia y esta debe ser desarrollada con una mirada objetiva, por lo que se hace indispensable la independencia del tasador en pro de un trabajo imparcial, que contribuya al desarrollo de la industria y se desarrolle siempre en el marco de la transparencia y las buenas prácticas en el mercado inmobiliario y financiero.

De acuerdo a la Superintendencia de Bancos e Instituciones Financieras “todos los bienes corporales que se constituyan en hipoteca o prenda deben estar respaldadas por una tasación o certificación de su valor, realizada y suscrita por personas que sean idóneas en la materia, de preferencia ajenas al banco, y en todo caso independientes del deudor”. En definitiva, además de estimar el valor de mercado de una propiedad, se suman factores adicionales: ser profesionales idóneos y especialmente, independientes y ajenos a conflictos de interés.

Es en la “independencia del tasador” donde me detengo. La citada norma de la SVS precisa que “las compañías deberán velar para que las personas contratadas para tasar los bienes raíces de su propiedad no tengan intereses que comprometan su independencia respecto a la aseguradora y de quienes tengan interés económico o puedan ser afectados por la tasación”, y en cada tasación el profesional deberá declarar “que no tiene hoy ni espera tener en el futuro, interés en la propiedad tasada ni ningún impedimento para llevar a cabo este trabajo en forma independiente”.

Lamentablemente, hemos visto que estas condiciones básicas exigidas por el ente regulador han sido vulneradas por la inclusión de empresas dedicadas a la intermediación inmobiliaria como tasadores en algunas entidades financieras. Como compañía nos mantenemos alejados de estas prácticas, para Tinsa la esencia de nuestro trabajo, y en lo que somos expertos, es la búsqueda de valor justo y objetivo, eliminando cualquier sesgo que pueda ir en contra de aquello.